Sanando las realciones con bebes nacidos muertos y abortados

FRUTO: Sanación, Perdón.

Tal vez la sorpresa más grande de nuestro ministerio es la curación física y emocional que puede ocurrir muy rápida y profundamente cuando oramos por bebés nacidos muertos y por abortos espontáneos y provocados. Por ejemplo, después de rezar por sus tres traumáticos abortos, Sandy retorno a casa para encontrar a su hijo de siete años que había sido hiperactivo desde su nacimiento, capaz de dormir por primera vez durante toda la noche, y despertarse normalmente para la escuela al día siguiente. Durante las próximas semanas, Sandy se dio cuenta no solamente de que la hiperactividad de su hijo había cesado, sino también de que su incapacidad para aprender, diagnosticadas como permanente, había desaparecido.

Sheila Fabricant, Dennis Linn, Matthew Linn